Alfabetizan a débiles visuales en Celaya

CHRISTIAN RAMÍREZ
NOTA PUBLICADA: 9/1/2010

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Sólo los municipios de Celaya y Cortazar fueron favorecidos con la aplicación de programas de estudio que permiten a personas invidentes y otras capacidades diferentes concluir sus estudios de primaria y secundaria por parte del Instituto de Alfabetización y Educación Básica para Adultos (Inaeba).

De acuerdo a Luz Verónica Aranda Orozco, directora general del Instituto, el ambiente en donde se desarrollan estas actividades académicas es de confianza y respeto.

Explicó que la duración de las clases es hasta de cuatro horas, dos días a la semana; dijo que con ello también buscan elevar la autoestima de las personas, que se da instrucción para que se dé una formación completa en estos círculos de estudio, donde la metodología está diseñada y pensada para enseñar desde la discapacidad para la discapacidad.

En Celaya son 15 las personas que actualmente estudian en los niveles de primaria y secundaria, así como la alfabetización; estos se imparten en el Templo de Tierras Negras; y en el caso de Cortazar, son 13 personas.

Aranda Orozco mencionó que ante la falta de recursos y de asesores educativos no ha sido posible extender este tipo de enseñanza a otros puntos del estado, pero que seguirán tocando puertas y pidiendo apoyo para lograr involucrar en estas acciones a un mayor número de personas.

“El año pasado ya egresaron seis personas de nuestros círculos de estudio y queremos ayudar a esta población que es muy vulnerable, y mediante los medios queremos convocar a los que estén en esta situación”, dijo.

Dentro del censo realizado desde el año 2000, tan sólo en Celaya se tenían alrededor de 22 mil 500 habitantes con problemas de la vista, de los que sólo 600 lograron terminar una carrera técnica y unos 3 mil 500 la educación primaria.

La Directora General del Inaeba expresó que ante la falta del material apropiado se trabaja con materiales creados especialmente por los asesores educativos, que tienen como encomienda lograr que de siete a nueve meses los estudiantes logren acreditar la primaria y secundaria.

“Nosotros lo que enseñamos son las clases de español, matemáticas, ciencias naturales, ciencias sociales. Y en la secundaria se tratan temas más abiertos, para que si se quiere, se pueda entrar a alguna preparatoria a continuar con sus estudios”, dijo Araceli Díaz Barbosa, profesora de este círculo de estudio.

Mencionó que los elementos que se tienen que tener para poder trabajar con personas con alguna capacidad diferente son las ganas de hacerlo y tener disposición y dedicación.